El equipo de Ricardo Carbajal derrotó a La Máquina y se coló a liguilla con el último boleto de clasificación directa.
La Franja es capaz de dividir hasta un estadio mundialista. Los visitantes no solamente frustraron una despedida amistosa del Cruz Azul del Coloso de Santa Úrsula, sino que lograron partir el alma celeste de los aficionados en las gradas.
De inicio, sorprendió la cantidad de poblanos que hicieron acto de presencia en la capital. Una de las cabeceras, como es costumbre, era comandad por los hinchas cementeros; no obstante, del otro costado se advirtió el predominio de personas enfranjadas, las cuales acapararon el protagonismo en los cánticos.
Dicho apoyo inspirador fue contagiado a los futbolistas del Puebla, ya que Guillermo Martínez ejecutó un gran remate de cabeza para que se adelantaran en el marcador durante el primer tiempo. Más allá de que Willer Ditta emparejara el partido minutos después, en la parte complementaria Gastón Silva se impulsó de dicha fuerza sonora para empujar el balón en un córner y sentenciar la victoria.
La pasión fue desenfrenada por asegurar la clasificación a la fiesta grande del futbol nacional por séptima ocasión consecutiva mediante ese sexto lugar en la tabla. Además, completaron su tercer triunfo al hilo.Simultáneamente, los fanáticos de Cruz Azul no desaprovecharon para mostrar su descontento y gritaron: “¡Fuera Velázquez!”.
El clima es desolador para La Máquina, con la expectativa de presentar novedades el próximo semestre para obtener resultados más alentadores. Mientras tanto, el Puebla sueña con imponerse en liguilla, sin importar haber comenzado estrepitosamente el torneo. La Franja aspira a brillar en el gran escenario: la fase final del Apertura 2023.