Los Dallas Cowboys han sido de los perdedores en la agencia libre del 2024 en la NFL, la razón es su poco espacio de los dólares libres en el tope salarial para el 2024, que será de $255.4 millones de verdes. El Cowboys sólo incorporó un jugador nuevo a su roster, el linebacker Erick Kendricks, procedente del Minnesota Vikings. Por otro lado, las salidas de jugadores hacia otros equipos fueron numerosas.
Los jugadores más importantes que partieron en la agencia libre, han sido el corredor Tony Pollard, el receptor Michael Gallup, el tackle ofensivo derecho Tyron Smith y el centro Tyler Biadasz. A la defensiva, no tendrán en el 2024 al esquinero Stephon Gilmore, el EDGE Dante Fowler Jr., el safety Jayron Kearse y el tackle defensivo Neville Gallimore. Si a esto sumamos el retiro del linebracker Leighton Vander Esch, tenemos a unos Cowboys con aspiraciones bajísimas para arribar al Super Bowl LIX y también con complicaciones para alcanzar los playoffs.
No omito mencionar el galimatías que se les viene, la cantidad y sobretodo la calidad de jugadores que los Cowboys tendrán como agentes libres al terminar el 2024: Cee Dee Lamb, Micah Parsons, Dak Prescott y Zack Martin.
En relación al Draft del 2024, llevado al cabo en Detroit del 25 al 27 de abril, la historia con el Dallas Cowboys fue más positiva. Derivado de su mala posición y circunstancia en la agencia libre del presente año, la escuadra de la ”Estrella Solitaria” ha tenido que reclutar jugadores que tendría que usar como novatos que serían titulares de primer impacto, es decir, varios no tendrán opción a ir ”poco a poco”, sino que van a tener gran responsabilidad desde la semana 1 en temporada regular. En el peor de los casos, los reclutados, serán titulares de rotación ante de la desbandada de más de siete jugadores titulares importantes en la temporada baja.
En la primera ronda, en la posición 29, reclutaron al tackle ofensivo Tyler Guyton de los Sooners de Oklahoma. Se espera que Guyton sea el tackle izquierdo, quien la cubra las espaldas, el lado ciego al quarterback derecho Dak Prescott. De éste modo, en el guardia izquierdo permanecería Tyler Smith. Guyton será titular de primer impacto, luego de que Tyron Smith le cubrirá el lado ciego a Aaron Rodgers en los Jets, ante su salida del Cowboys.
Para la segunda ronda, en la posición 56, el Cowboys escogió al pass rusher, al EDGE o ala defensiva derecho Marshawn Kneeland procedente de Western Michigan. Será titular de rotación, puesto que ahí está el gran Micah Parsons, pero ante el peligro que implica que Micah pueda salir del equipo al final del 2024, Dallas piensa que Kneeland sea una opción en el futuro.
Tuvieron dos selecciones en la tercera ronda, en la posición 73 al centro de Kansas State, Cooper Beebe, para suplir la ausencia de Tyler Biadasz, quien partió a los “Commanders” de Washington; aunque se estima que será titular de rotación pues Brock Hoffman se perfila para ser el titular.
En la posición 87, reclutaron al linebacker Liufau Marist de Notre Dame, una universidad que tradicionalmente siempre ha desarrollado buenos linebackers. Maris suplirá el retiro de Vander Esch, primera selección de los texanos en 2018, que con tan solo seis temporadas en la NFL tuvo que retirarse debido a las graves lesiones que tuvo en su carrera.
El Cowboys no tuvo cuarta ronda, pero en la quinta se fueron por el esquinero izquierdo Caelen Carson de Wake Forest, para ser suplente de Trevon Diggs.
En la sexta por el receptor Ryan Flournoy, como suplente de Jalen Tolbert y en la séptima el guardia izquierdo Nathan Thomas, para tercer equipo.
Los Vaqueros de Dallas no tienen buenas expectativas éste 2024, independientemente de los que ya se fueron, Jerry Jones y su staff directivo tendrá que resolver el destino de Dak Prescott, quien pretende cobrar $60 millones de USD por año para el 2025; sin embargo, tiene foja de 2 ganados y 5 perdidos en playoffs desde 2016, temporada que debutó en la NFL.
No obstante haber sido el líder de TDs en 2023 con 36 para 4,516 yardas y poseer un récord de 73-41 en su carrera y 202 pases de touchdown, por 74 intercepciones, un buen ratio de 2.7 (2.7 touchdowns por cada intercepción), sus números y actuación en playoffs no le han alcanzado para ser un quarterback de élite y con los tamaños para conducir a su equipo para llegar y ganar el Super Bowl, mismo que desde enero de 1996 se les niega.
Si la decisión fuese mía, si yo estuviera en los zapatos de Jones, dejaría ir a Prescott y buscaría en el draft a su sucesor, con los riesgos y tiempo que esto implicaría, porque ya se demostró una y otra vez que Prescott no tiene sangre para resolver los momentos de presión en playoffs para efecto de ganar los juegos importantes; continuar con él es perder tiempo, no se sacará petróleo de esa tierra.