El “coacheo”
El coacheo de los Kansa City Chiefs fue fundamental, éste equipo nos hace recordar a la mancuerna de Brady-Belichick, las comparaciones son inevitables y nos dan una referencia. Me refiero a Andy Reid y su quarterback Patrick Lavon Mahomes II, quienes potencian hombres sin tantos nombres, Reid y su coordinador ofensivo Eric Bieniemy le dan variedad a la selección de jugadas para que Mahomes, en la ejecución, le produzca brillantez a jugadores normales, algo así como el slogan del legendario Blichick “do your job”. De ésta forma jugadores “desconocidos” como Kadarius Toney tuvo una recepción de touchdown y el regreso más grande de patada de despeje de 65 yardas para dejar el balón en la yarda cinco de Filadelfia y tocar la puerta. Algo similar sucede con el coordinador defensivo, el gran Steve Spagnuolo, quien pudo parar a Tom Brady en el Super Bowl XLII y su temporada “invicta” cuando fungiera como el coordinador defensivo de los Giants en la temporada del 2007.
Las trincheras, the “trenches”
Otro factor fue, tal y como se comentó durante toda la semana, la línea ofensiva de Chiefs y el “front seven” de Eagles. Filadelfia tuvo cero capturas de quarterback ayer, la protección a Mahomes fue impresionante, aquí también tienen que ver los coaches.
El juego por tierra
La siguiente variable que también la ganó Jefes fue el juego por tierra. En los hechos, las armas más fuertes de Eagles fueron el juego por tierra y su defensiva; sin embargo, no corrieron el balón tal y como se esperaba; si bien, Hurts rompió un récord con 70 yardas por tierra para un quarterback en un Super Bowl, la ofensiva total terrestre fue de tan solo 115 yardas, cuando en los partidos de playoff, contra 49ers y Giants, corrieron para 426. Myles Sanders sólo corrió 16 yardas en siete intentos, Gainwell 21 y Scott ocho. Kansas City, por su parte, tuvo una ofensiva terrestre de 158 yardas, 44 de Mahomes y 76 de Isiah Pacheco, con un touchdown y un promedio de 5.1 yardas por intento.
La “automotivación”
Al final del Super Bowl LVII, en la conferencia de prensa, le pregunté al coach Reid sobre lo que les había dicho a sus jugadores en el medio tiempo para efecto de motivarlos y me respondió que sus jugadores no requieren ser motivados, el equipo está tan trabajado y existe la congruencia debida que ese tema ya no es factor; sin embargo, en la porción táctica sí ajustaron porque la primera serie ofensiva del tercer cuarto, Chiefs se dedicó a correr y también, la estrategia que esperábamos, a través de pases rápidos en distancia corta, de una a nueve yardas por la velocidad de la defensa de Eagles y la lesión de Mahomes.
El «coacheo”, la dirección de Chiefs hizo diferencia, tanto para parar la carrera de Eagles, provocar intercambios de balón, a través de una defensiva agresiva y como para correrle el balón a Filadelfia, que precisamente era su departamento menos fuerte, la defensiva por tierra.
Los errores
Finalmente, ayer que estábamos en la tribuna de prensa con los colegas, comentábamos que casi siempre gana el equipo que menos errores comete. Pat Mahomes no cometió errores, no tuvo pases interceptados y tampoco fumbles; el único error de Jalen Hurts, el quarterback de los Eagles, le costó siete puntos, un touchdown que regresó Nick Bolton.
Hurts tuvo un juegazo, con cuatro touchdowns, de los cuales tres fueron por tierra, 304 yardas por aire y 70 por tierra, pero cometió sólo un error. Mahomes, increíblemente no pasó de las 200 yardas por aire, con 182, 21 completos de 27 intentos y tres touchdowns por pase, pero no tuvo intercambios de balón y eso fue fundamental.
Cuerpo médico
Otro acierto de la dirigencia de Chiefs fue el tratamiento durante el medio tiempo a Mahomes, en relación a su esguince de tobillo alto. El de Tyler, Texas admitió que tuvo dolor y no se sentía bien cuando terminó la primera mitad, pero reiteró que eso no le iba a impedir dejar todo en el campo y que estaba contento que le alcanzó para poder ganar. Gran valentía y «huevos» del graduado de Texas Tech.
La ”base por bolas”
Finalmente y para cerrar con broche de oro, en la estrategia de Andy Reid, la aplicó tal y como si esto se tratara de un juego de “béisbol”, cuando das una base por bolas intencional a un buen “tolete” para evitar enfrentarlo. Esto sucedió al final del encuentro cuando evitó anotar de siete a través de su corredor Jerick McKinnon, éste se deslizó en el yarda dos de Eagles, consumieron tiempo y patearon el gol de campo de la victoria; aquí cabe la analogía con el béisbol porque si Chiefs anotaba de siete, faltaban 1:38 en el reloj en el partido y había altas probabilidades que la ofensiva de Filadelfia anotara de siete para empatarlos, para evitar esto, prefirió patear un gol de campo y dejarle muy pocos segundos a los de verde y con esto sentenciar el juego, una jugada maestra, con un poco de riesgo, pero que le resultó a uno de los coaches más grandes ya de todos los tiempos, Andy Reid.
Gran juego, sobresaliente Super Bowl de dos grandes equipos, ganó el mejor, por muy poco, los Kansas City Chiefs 38-35.
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